El cultivo de cítricos, especialmente la naranja, es un gran referente español, teniendo sus principales bases en la zona de Huelva, Sevilla y Comunidad Valenciana. Existen muchos estudios científicos que nos dan a conocer cómo realizar una adecuada nutrición vegetal para conseguir buena calidad de zumo, tamaño y número de frutos.

Figura 1. Floración y cuajado en cítricos.

La fase de floración y cuajado de frutos resulta crítica para muchas variedades que tienen problemas en la producción. Por eso,  la correcta aplicación de fertilizantes antes y durante la floración y durante el cuajado de frutos es esencial para mantener un número adecuado de frutos por árbol.

Los microelementos juegan un papel esencial en la floración de los cítricos. Entre ellos, y por su nivel de consumo, los más importantes son el hierro, zinc y manganeso. Están relacionados con la fase de cuajado y número de frutos, y su insuficiencia en la planta causa desórdenes fisiológicos y reduce el número de frutos por árbol.

El zinc interviene directamente en la síntesis de algunos aminoácidos, aunque su función más relevante en las plantas es la activación de numerosas enzimas, destacando la síntesis de auxinas (ácido indolacético). Participa, por tanto, en la producción de reguladores de crecimiento responsables de la elongación del entrenudo y desarrollo de cloroplastos. Su deficiencia reduce significativamente el crecimiento y el potencial productivo.

El manganeso está relacionado con la fotosíntesis, el uso eficiente del nitrógeno, el metabolismo de proteínas y la activación enzimática. Actúa sobre el metabolismo de carbohidratos y ácidos grasos, reacciones de fosforilación y formación de ácidos nucleicos (AND y ARN), además de intervenir en la fotólisis del agua en la fotosíntesis, así como en la síntesis de sacarosa en la planta y en la formación de proteínas. Deficiencias severas y persistentes de manganeso reducen el crecimiento, la productividad, perjudicando el desarrollo general de las plantas.

Figura 2. Carencias de zinc (izquierda) y manganeso (derecha) en hojas de cítricos.

Figura 2. Carencias de zinc (izquierda) y manganeso (derecha) en hojas de cítricos.

urante el proceso de formación de la flor, el manganeso interviene en la germinación del polen y el crecimiento del tubo polínico, mientras que el zinc favorece la formación y viabilidad del polen. Resulta así, esencial, mantener una nutrición adecuada de estos dos nutrientes para asegurar una floración adecuada y viable para obtener una cosecha suficiente y de calidad.

El cuajado y desarrollo inicial del fruto depende, entre otros factores, de los efectos de competencia establecidos entre el número de flores en desarrollo. En la mayor parte de las variedades en cultivo, el déficit de cuajado sólo se presenta cuando la planta florece mucho pero también es posible encontrar cosechas reducidas cuando la planta florece muy poco. En el primer caso, es incapaz de nutrir a todos los ovarios que inician el desarrollo y la mayor parte de éstos se desprenden del árbol, reduciéndose significativamente la cosecha. En el segundo, la reducción del número de flores siempre está relacionada con un número muy elevado de frutos cosechados (alternancia de cosechas) (Moss,1971); la acción de éstos puede ser a través de un efecto nutricional, reduciendo la acumulación de reservas previa a la diferenciación floral, o a través de una inhibición de la floración provocada por la síntesis de giberelinas que tiene lugar en los frutos (Bellato et al., 1998).

Figura 3. Esquema de la alternancia de cosechas en cítricos.

Figura 3. Esquema de la alternancia de cosechas en cítricos.

Resulta mucho más frecuente el problema causado por exceso de flores. Este se presenta como consecuencia de cosechas reducidas. La ausencia de frutos es la causa de una falta de control de la floración, y el exceso de flores se traduce en una reducción de la cosecha que reinicia el ciclo. En estos casos, la intensidad de la competencia entre flores en desarrollo es responsable de la disminución del número de las que iniciaron el desarrollo, así como del reducido tamaño final del fruto.

Figura 4. Esquema de la falta de producción continua originada por el exceso de flores en los cítricos.

Figura 4. Esquema de la falta de producción continua originada por el exceso de flores en los cítricos.

Este efecto de la intensidad de floración sobre el cuajado es general para todas las especies y variedades y para todas las condiciones climáticas. Experimentos realizados con el Tangor ‘Ellendale’ en España y Uruguay, coordinadamente, indican un descenso del porcentaje de flores cuajadas a medida que la floración es más intensa (Gravina et al., 1996), con independencia del área de cultivo.

Para evitar alcanzar intensidades de floración tan elevadas que lleguen a comprometer el cuajado y disminuir significativamente la cosecha, se realizan tratamientos hormonales basados en la aplicación de ácido giberélico (como factor de inhibición de la floración) (Agustí, M. et al., 2003), o bien de algún tipo de bioestimulantes que aporten a la planta metabolitos capaces de activar la síntesis de factores promotores e inhibidores en equilibrio suficiente para llevar a cabo una buena floración y un buen cuajado.

Desde el Departamento Técnico de Cultifort queremos ofrecer una recomendación para ayudar a cubrir las necesidades nutricionales y metabólicas requeridas durante la floración y el cuajado de los cítricos.

Manzifort

Se trata de una formulación líquida de elevada riqueza en zinc (8,7% p/v) y manganeso (10,2% p/v) quelatados con EDTA, ácidos policarboxílicos (2,9% p/v) y azúcares reductores* (2,9% p/v).

Se recomienda aplicarlo durante las brotaciones de primavera y verano o durante las últimas semanas de maduración para acentuar el color de los frutos.

Producto certificado para su uso en agricultura ecológica (CAAE).

Manzifort

BVC 2021

Bioestimulante líquido para aplicación foliar y de gran efecto sinérgico entre aminoácidos (2,4% p/v) y complejo algínico en emulsión (24% p/v), con nitrógeno (12% p/v) (uréico, amoniacal, nítrico y orgánico), potasio (1,2% p/v) y azúcares reductores* (12% p/v).

BVC 2021 favorece la síntesis de proteínas e hidratos de carbono y promueve el inicio de la actividad fisiológica de la planta, controla problemas de alternancia de producción, mejora la calidad de los frutos y adelanta la maduración. El complejo algínico en emulsión incluido en su formula, contiene sales minerales, vitaminas, aceites esenciales, proteínas y fitohormonas naturales (citoquininas, auxinas y giberelinas), además de otros compuestos tales como betaínas, poliaminas y oligosacáridos, que aumentan la resistencia de la planta frente a bajas temperaturas y condiciones meteorológicas adversas. Igualmente, BVC 2021 actúa sobre la dominancia apical, ejerce un control multifactorial en la floración, retrasa la senescencia foliar, participa en el proceso de maduración de los frutos y puede influir en la coloración de los mismos debido a su contenido en carotenoides.

REFERENCIAS

Agustí M., Martínez A., Mesejo C., Juan M., Almela V., 2003. Cuajado y Desarrollo de los Frutos Cítricos. Serie de Divulgación Técnica. Consejería de Agricultura, Pesca y Alimentación. Generalitat Valenciana.

Bellato M., Castro PRC. Y Agustí M.,1998. Alternância de produção em citros. Laranja, 19:293-304.

Gravina A., Rabiza H., Juan M., Almela V. y Agustí M., 1996. Flowering-fruiting interrelationships in ‘Ellendale’ tangor under the growing conditions of Spain and Uruguay. Proc. Int. Soc. Citriculture, 2: 1081-1085.

Moss GI., 1971. Effect of fruit on flowering in relation to biennial bearing in sweet orange (Citrus sinensis). J. Hort Sci., 46: 177-184.