1. ANTECEDENTES
La descripción de ToLCNDV se realizó en los años 90 en territorio indio, como afectación del cultivo de tomate, donde se convirtió en uno de sus principales fitopatogenos (Paddidan y col., 1995). En estos últimos años el número de huésped y familias de cultivo ha aumentado notablemente alcanzando al cultivo de cucurbitáceas y otras solanáceas, considerándose un problema emergente en países como Pakistán, Bangladesh, Tailandia, Indonesia e Irán.
En cuanto a España fue identificado por primera vez a mediados del 2012 en cultivo de calabacín en la región de Murcia (Juárez y col., 2014), para posteriormente ser identificado en Almería y Málaga tanto en cultivos protegidos como cultivos en calle.
Según se cita, entre los veinte y cuatro cultivos más afectos, destacan los de melón y calabacín.
La propagación acelerada de este virus hacia los litorales mediterráneos la aplican posiblemente al solape de ciclos de producción de los monocultivos susceptibles en época estival, donde las temperaturas favorecen y aceleran los ciclos de vida de Bemisia tabaco en toda la región mediterránea, siendo esta mosca blanca vector responsable de su trasmisión.
2. SITUACIÓN PENINSULAR
Los estudios realizados sobre la secuencia genómica de los aislados españoles de ToLCNDV evidencian que se trata de una nueva cepa a la que se le ha denominado ToLCNDV-ES, que puede haber evolucionado por recombinación (Fortes y col., 2016; Ruiz y col., 2017a).
Estos aislados presentan, además, una alta identidad de secuencia y forman un grupo homogéneo, probablemente debido a un único evento de introducción reciente. Este es un fenómeno típico que ocurre cuando una planta se convierte en un nuevo huésped. Por lo tanto, se puede concluir que la población española (y posible mente también toda la población europea y norteafricana) de ToLCNDV ha sido constituida por un solo aislado (Zaidi y col., 2017).
3. SINTOMATOLOGÍA EN MELÓN
En general, el virus de Nueva Delhi provoca un mosaico marcado con efectos cloróticos en hojas superiores y medias, mientras que las más jóvenes deriva en un rizamiento hacia el envés o el haz de la misma.
Si precisamos en melón podemos citar que en las hojas jóvenes se produce un acucharado produciéndose un rizado hacia el envés y marcándose amarilleos internerviales y marginales pudiéndose apreciar paralelamente una pérdida de vigor de planta por acortamiento de los entrenudos.
En cuanto a una sintomatología en estadios avanzados de fructificación, el fruto puede presentar rajados y hundimientos.
4. CARACTERIAZIÓN DEL VECTOR
Como hemos citado, su principal trasmisión se produce por medio de la mosca blanca, Bemisia Tabaci de forma persistente y circulativa (Sohrab y col., 2003).
Tradicionalmente la mosca presente en la península se ha compuesto por especies cripticas invasoras MEAM1 de Oriente medio y MED (Mediterránea) conocidos como biotipos B y Q, aunque últimamente estudios filogenéticos en cultivos de cucurbitáceas de diferentes poblaciones en el sureste español, precisan la mayoría mediterránea Med-Q1.
Pero este vector no solo, se queda en esta transmisión, sino que también puede propagar Además del virus Nueva Delhi, esta plaga es también trasmisora del virus de las venas amarillas (CVYV)
5. MEDIDAS PREVENTIVAS EN CULTIVO EN CALLE
La problemática del cultivo de cucurbitáceas al aire libre y en concreto de melón, es patente frente a la de cultivo invernado, ya que en estos últimos se están implantando medidas de hermeticidad y por tanto la presencia o llegada del vector a planta es mucho más baja, teniendo tan solo una media de incidencia de 1 de cada 15 plantas en este cultivo en el área de Almería, que es por su ciclo donde se desarrolla su cultivo de forma protegida, además de contar con la mayor adaptabilidad de instalación de Amblyseius swirskii, depredador natural de mosca.
En cuanto a medidas, por tanto, para tratar de reducir incidencias y severidad en su cultivo al aire libre como practicas generales destacaremos:
1. Utilización de cubiertas de agrotextiles. Se trata de una buena medida para proteger las primeras etapas de un cultivo al aire libre, sobre todo en los meses más cálidos. Éstas deben ser suficientemente anchas y quedar bien selladas por los laterales. También pueden colocarse en el interior de los invernaderos, cuando carezcan de una malla adecuada, que les permita asegurar la no entrada del vector.
2. Mantener un adecuado control del vector hasta el final de los cultivos. Se trata de una medida muy importante que los agricultores deben realizar, bien con enemigos naturales o con tratamientos químicos integrables.
3. Eliminación de cultivos contaminados. Si existieran poblaciones muy altas de insectos vectores (pulgones y moscas blancas) y de plantas con síntomas de este y otros virus, se aconseja realizar un tratamiento con un insecticida adulticida o con un insecticida más un desecante y eliminar el cultivo, enterrándolo o sacándolo de forma controlada de la explotación.
4. Realizar tratamientos preventivos con elicitores de cara a reducir o paliar el grado de incidencia o severidad del virus.
5. No colocar nuevos cultivos al lado de cultivos contaminados.
6. Nunca solapar distintos ciclos de cultivo.
7. Realizar una biofumigación o biosolarización si el terreno y condiciones lo permiten.
8. Si las explotaciones no disponen de cerramientos eficaces o se encuentran al aire libre, es muy importante conseguir que todos los agricultores realicen un adecuado control del vector, con productos integrables, hasta el final del cultivo, para favorecer el con trol biológico y realizar una rápida y adecuada eliminación de las plantas enfermas, así como mantener las parcelas entre ciclos de cultivo limpias de restos de plantaciones anteriores y de hierbas que pudieran hospedar y multiplicar al virus y al vector.
6. PROPUESTA CULTIFORT – EL USO DE QUITOSANO
6.1. Eficacia indirecta
El quitosano, con sus diversas propiedades, es un agente antiviral que puede suprimir infecciones virales en plantas. Su eficacia depende de factores como el grado de polimerización, desacetilación y carga positiva, así como de modificaciones químicas. Puede inactivar partículas virales y prevenir la multiplicación del bacteriófago en cultivos infectados. Al imitar el contacto de la planta con patógenos, induce reacciones protectoras, limitando la propagación viral y promoviendo la resistencia adquirida sistémica. La eficacia varía según la combinación hospedero-virus, concentración y método de aplicación. Además, el quitosano activa respuestas de defensa en las plantas, como la síntesis de lignina y calosa, la producción de enzimas y proteínas relacionadas con la patogenicidad, fortaleciendo la resistencia ante infecciones virales.
6.2. Eficacia directa
La unión de la quitosana con el ADN y la inhibición de la síntesis de ARNm ocurren a través de la penetración de la quitosana hacia el nucleo de los microorganismos y la interferencia con la síntesis de ARNm y síntesis de proteínas (Sudarsham et al. 1992).
6.3. Cultisano
CULTISANO es una solución líquida que contiene quitosano (poli-D-Glucosamina), un polímero natural procedente de la cáscara de crustáceos, combinada con aminoácidos obtenidos por hidrólisis enzimática de proteínas vegetales.