La cereza tiene una buena comercialización, por ser el primer fruto de hueso que entra en el mercado, siendo muy cotizadas las variedades extra-tempranas y extra-tardías, por pagarse a un precio superior al del resto de variedades. Gracias a los buenos precios de comercialización y a que los costes de cultivo no son muy elevados (el mayor es la recolección, que supone un 50% aproximadamente), resulta un cultivo muy rentable.

La floración de los cerezos suele tener lugar cada año en el periodo entre finales de marzo y principios de abril (para la mayoría de las variedades), y suele durar unos 15-20 días. Pero hay que tener en cuenta que las fechas de floración están condicionadas por la climatología, especialmente por el frío que tengamos durante el invierno, y por la variedad. Estos y otros aspectos sobre la maduración de la cereza fueron tratados en artículos anteriores, que puedes consultar haciendo click aquí.

La cereza es un fruto que, aunque no suele presentar problemas para alcanzar la madurez comercial, adelantos de pocos días en la maduración pueden desencadenar importantes diferencias de precios de venta. Puedes consultar los ensayos llevados a cabo sobre el adelanto de la maduración y uniformidad de la coloración de la cereza realizados en 2018 y 2019.

 

La conservación de la calidad de las cerezas después de cosecha presenta varios problemas debido a las características propias del fruto, que es extremadamente delicado y está sujeto a infecciones por patógenos, deshidratación del pedicelo, pérdidas de firmeza de la pulpa, oxidaciones o pardeamientos, partidura y pitting superficial, etc.

Algunas de las alternativas de manejo post-cosecha en cereza son:

  • Pre-cooling o disminución de la temperatura de campo con aire forzado o agua helada y el almacenamiento en cámaras a 0 ºC y humedad relativa mayor al 95%.
  • Utilización de atmósfera controlada (AC) con concentraciones del 1-5% de oxígeno y del 5-20% de CO2 permiten bajar la actividad respiratoria y reducir los fenómenos de senescencia de las cerezas.
  • El mantenimiento de la fruta en atmósfera modificada (AM) supone menores costes y de más fácil aplicación. Por ejemplo, el uso de film transparente semipermeable, permite reducir la actividad respiratoria minimizando las perdidas de humedad. Requiere que se mantenga la cadena de frío (0-5 ºC) durante todo el periodo de comercialización, ya que de no hacerlo, pueden aparecer procesos fermentativos anaerobios. Tiene la ventaja de que los embalajes de atmósfera modificada permiten poder hacer la venta directa a distribución.

La AC y la AM, tienen una serie de limitaciones durante el manejo de la post-cosecha. En general, para las cerezas, la técnica de AC tiene un baja aplicación debido a los altos costes de inversión y operación que no se justifican por el periodo de conservación de la fruta. La limitación de la AM se debe a la tipología del film plástico empleado, pues para obtener concentraciones gaseosas óptimas se deberían utilizar films poco permeables, eficaces a bajas temperaturas, mientras que las condiciones térmicas de las estanterías de las cadenas de distribución suelen ser superiores a los 10 ºC.

Desde Cultifort planteamos un manejo complementario a las técnica comentadas, recomendando las aplicaciones de SPIRALIS Long Life durante la fase de cultivo, con el objetivo de mejorar la calidad de la fruta y su vida post-cosecha.

SPIRALIS Long Life es unas solución fertilizante que contiene un complejo de ácidos orgánicos y péptidos seleccionados relacionados con algas verdes y rojas, que facilitan su asimilación por la planta de forma sistémica, tanto ascendente como descendente y potencian el efecto bioprotector frente a diversos tipos de estrés.

SPIRALIS Long Life, está especialmente formulado para mejorar de forma notable las autodefensas frente a hongos y bacterias entre otros agentes patógenos.

SPIRALIS Long Life actúa en dos pasos. En primer lugar, se producen cambios estructurales en las paredes celulares, reforzando y aumentando la consistencia de los frutos y, en segundo lugar, se induce una mayor síntesis de moléculas con alta capacidad defensiva tales como proteínas PR y fitoalexinas. La vida post-cosecha se ve favorecida, por tanto, gracias a este freno impuesto a las condiciones y procesos de degradación de la fruta.

Con la ayuda de SPIRALIS Long Life, el agricultor podrá obtener una mayor rentabilidad de su cultivo, debido a la mayor vida post-cosecha de las cerezas, que permitirá mejorar el periodo de comercialización y distribución de la fruta, tanto en los mercados internacionales como en el mercado nacional.

 

 

SPIRALIS LONG LIFE